Mamá no me das nada de comer y tengo hambre. Ni siquiera me hablas o contestas, me siento muy triste en este líquido estéril que me tiene el cuerpo entumecido. Noto alterado mi corazón, tengo la respiración agitada, siento un nudo en el estómago. Estoy tensa, tengo muchos cambios de temperatura, paso de estar congelada a sentir calor. No experimento buenas sensaciones, tengo muchas ganas de salir de esta piscina y conocer el mundo. Este vientre es muy desagradable, hay muchas turbulencias y apenas puedo dormir. Siento desde aquí que estás triste, deprimida, angustiada, asustada y eso me hace sentir insegura, tengo frío, miedo y mucha desconfianza.